Durante la celebración, realizada en el Museo de la Arquitectura, integrantes de ambas instituciones confraternizaron y pasaron revista a la acción del año. El arquitecto Emilio Rivoira, presidente del CPAU, celebró la integración de la arquitectura solidaria como un capítulo más de la profesión, agradeció la respuesta a la encuesta organizada para conocer más acerca del momento difícil que pasa la matrícula, e instó a recordar la falta de Daniel Silberfaden, destacado profesional recientemente fallecido.
“Hemos superado tres tragedias últimamente- enumeró con ironía- la crisis financiera y con el FMI, la pandemia y el cambio de Código” aludiendo a lo difícil que es adaptarse a todas las nuevas situaciones que se generan, hasta que se asientan las modificaciones urbanas producidas.
Por su parte el arquitecto Darío López, presidente de la Sociedad Central de Arquitectos, subrayó la tarea de integración que están realizando ambas instituciones en defensa de la Arquitectura, y que “tarde o temprano se dará en todos los colegios del país”. Destacó también que pese a la pandemia, durante la gestión se avanzó en el tema SCA género, con una mesa dirigida a la transformación del estatuto para la incorporación de las mujeres como asesoras y jurados y en la dirección política institucional. En este momento se lleva adelante Mujeres que Construyen, para la generación de nuevas relaciones de los arquitectos con su rol transformador. La institución logró equilibrio económico, apuntó López y está retomando temas como el centro de resolución de conflictos, fundamental para los problemas que se presentan en la construcción. Mencionó el premio logrado con el librode SCA Diseño sobre Virginio Colombo, de la colección de arquitectura, y anunció uno nuevo con las conclusiones del Congreso de Fadea, sobre Trabajo e innovación, temática del congreso federal que permitió escuchar las voces de todo el país, con problemáticas diferentes.