La obra se desarrolló en 5 pisos de 5.300 m² totales para albergar a 520 empleados y demandó una inversión total de $ 60 millones. Se implementó un programa integral que incluyó el relevamiento físico del espacio, el desarrollo del programa de necesidades, el diseño del área de trabajo, el proyecto arquitectónico, el gerenciamiento y dirección de obra y la logística de la mudanza.
La tarea estuvo a cargo de Contract, especialistas en arquitectura corporativa, quienes llevaron adelante el diseño y la construcción de las nuevas oficinas en el edificio Intecons, en el barrio porteño de Saavedra.
“Las empresas de Internet como MercadoLibre son las que marcan tendencia en cuanto a las nuevas formas de trabajo. En estas oficinas se anticipan los espacios laborales en el futuro: con áreas multiuso, espacios alternativos para reuniones informales, zonas lúdicas o de relax. Además, las posiciones de trabajo se disponen de acuerdo a las necesidades y no a las jerarquías, promoviendo el trabajo en equipo y la sinergia interna”, apuntó Víctor Feingold, presidente ejecutivo de Contract.
La puesta en marcha del proyecto requirió del análisis estratégico del perfil de la compañía y del uso que hacen del espacio sus empleados, en su mayoría jóvenes de 20 a 30 años. Como resultado, se implementó el concepto de “oficina abierta” (Open Office) asociado a un modelo de gestión flexible que valora fundamentalmente la comunicación, la sinergia, el trabajo grupal y favorece además la optimización del espacio y el uso racional de la energía.
En este esquema el espacio es compartido y su distribución se asigna de acuerdo a un uso y no a una jerarquía. De esta manera, los puestos de trabajo fueron emplazados en islas con forma de “estrella”, en plantas que carecen de despachos privados y en donde todos son idénticos.
En este concepto de trabajo se hizo necesaria la creación de diferentes espacios alternativos que también permitieran privacidad y confidencialidad. Con este fin se desarrollaron “Phone Booths” o cabinas telefónicas individuales para realizar llamadas privadas, “Meeting Tables” o salas informales para reuniones creativas de hasta cuatro personas. Se dispusieron además distintas salas de reuniones para encuentros de entre 6 y 12 personas, con equipamiento multimedia de alta definición, iluminación exterior testigo de ocupación y monitoreo electrónico de disponibilidad mediante un tablero central en recepción que optimiza la administración.
Entre las áreas comunes de esparcimiento, Contract diseñó un comedor para 60 personas con área de lounge, equipamiento de diseño internacional, televisión y cocina. El proyecto también dispone de un área de cafetería en cada piso y una peluquería exclusiva para los empleados.
SUSTENTABILIDAD
Otra ventaja de las oficinas abiertas es que favorecen el uso racional de la energía, ya que la luz natural no es obstaculizada por despachos cerrados, obteniendo así un importante ahorro en iluminación artificial y un bajo consumo en el uso de equipos de refrigeración y calefacción. Además, la iluminación de las áreas privadas fue diseñada con sensores presenciales que ayudan al ahorro.
Los sanitarios cuentan con grifería robótica en las bachas y doble descarga de inodoros economizando así el consumo de agua potable.