Una novedad es que la ley limita la instalación de playas de estacionamiento y depósitos, hoy habituales en esos espacios pero que generan áreas degradadas en los barrios.
“El objetivo del proyecto es convertir los bajo autopistas en espacios más seguros, iluminados y amigables para los vecinos. En ese marco, la ley autoriza al Gobierno de la Ciudad a concesionar 75 predios para actividades comerciales, culturales y deportivas, además de destinar un 10% a nuevos espacios públicos y verdes”, afirmó Franco Moccia, ministro de Desarrollo Urbano y Transporte a cargo de impulsar la iniciativa.
Además, para fomentar las inversiones de calidad, los plazos de concesiones se extendieron hasta un máximo de 30 años. “Hasta ahora se otorgaban permisos por 5 años y luego, en cada caso, se extendían a través de una ley específica, lo que provocaba que las inversiones en los bajo autopista fueran de baja calidad y poca infraestructura para los barrios”, agregó Moccia.
En este sentido, la normativa establece que quienes ganen las licitaciones estarán obligados a habilitar y mantener baños públicos con acceso desde la calle, y que los espacios deberán ser con frentes abiertos, iluminados y conectados con el espacio público.
Los permisos de uso que hoy están en vigencia mantendrán su condición hasta el plazo establecido en su respectiva ley o contrato. Quedan exceptuadas 27 instalaciones donde actualmente funcionan organizaciones sin fines de lucro, asociaciones, federaciones, fundaciones, sindicatos, clubes y centros de jubilados, que continuarán brindando sus servicios.
El proceso legislativo del proyecto continuará con el tratamiento en audiencia pública y la votación en segunda lectura.