Inspirándose en elementos “identitarios” del ex Convento, alumnos de Diseño de UADE intervinieron el pasillo conector de la exposición. Crearon un revestimiento de pared y un banco reinterpretando las celosías de las aberturas de las habitaciones del claustro, que fueron construidas con un material contemporáneo, como lo es el acero inoxidable (provisto por la empresa Atrim), dando una nueva forma de aplicación a uno de sus productos.
Las piezas fueron aplicadas sobre una estructura de caño de acero común, lijado y encerado que se cuelga de la mampostería.
El trabajo fue construido en los UADE Labs, laboratorios universitarios de UADE, por alumnos y profesores quienes produjeron, por su permeabilidad y reflejos, una “intervención respetuosa y silenciosa” del convento.
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