Frente a este panorama, el Día Mundial de la Eficiencia Energética, que se celebra cada 5 de marzo, se presenta como la oportunidad de reflexionar y a buscar soluciones que fomenten el uso eficiente y responsable de la energía, la adopción de fuentes energéticas renovables y de políticas públicas que contrarresten el cambio climático.
La eficiencia no implica renunciar a la calidad de vida, sino de obtener los mismos bienes y servicios energéticos empleando menos recursos, de una forma inteligente. Se trata también de generar y fomentar la producción de energía a través de fuentes limpias como la solar o eólica. El licenciado Pablo Greco, director de la empresa Hissuma Solar, expuso algunos tips para el consumo responsable:
- Comprar aparatos con tecnología energéticamente eficiente. Hay siete categorías identificadas con barras de colores y letras, desde el color verde y letra A para los equipos más eficientes, hasta el color rojo y la letra G para los menos eficientes.
- Al usar el aire acondicionado, utilizarlo a la temperatura recomendada (24 °C para verano). Cada grado de diferencia supone un ahorro de un 8% de energía.
- En iluminación, preferir lámparas de bajo consumo y led. No dejar luces encendidas en habitaciones que no estamos utilizando.
- No dejar enchufados los artefactos eléctricos que no se usan, ni mantenerlos en stand-by porque continúan consumiendo. En cuanto a calefacción, se recomienda una temperatura de 20°C .
- Hacer un consumo responsable, no dejar correr el agua caliente en la ducha. Optar por tecnologías eficientes, tal como los termotanques solares, que ahorran hasta un 70% de la energía utilizada para calentar el agua sanitaria.