El Oeste suma oferta de condominios

El desarrollo, de COMA S.A. junto al estudio de arquitectura Bodas Miani Anger, está , compuesto por 195 unidades, complementa un master plan compuesto por dos edificios de oficinas triple A con certificación LEED y un pase comercial.

Actualmente, la zona oeste se encuentra en pleno desarrollo y muestra crecimiento en materia de inversiones inmobiliarias dado por el valor de la tierra, la cual permite desarrollar emprendimientos con una incidencia menor del m2. Actualmente en Vilanova, las unidades parten de los $935.000 y se pueden encontrar departamentos que van de los dos hasta los 5 ambientes.

El proyecto se encuentra en plena construcción en un contexto marcado por el lanzamiento de un plan de créditos hipotecarios y en el inicio del blanqueo de capitales, razón por la cual, Bruno Martino, director ejecutivo de COMASA destaca: “Vemos con mucho optimismo el impacto que tendrán estas medidas en el dinamismo del mercado. El gran desafío de los desarrolladores será cómo nos estructuramos para atender esta nueva configuración de demanda que va a surgir. De manos del blanqueo de capitales esperamos la vuelta del inversor a roles significativos y creemos que la posibilidad de blanquear a costo cero a través de la participación en fondos de inversión destinados a la adquisición de inmuebles hace que los productos que en 24 meses puedan estar listos sean atractivos”.
 
En cuanto a los amenities diferenciales, el proyecto de dos manzanas tendrá un jardín central, balcones y terrazas o jardines privados, parrillas, piscina y solarium, un salón de usos múltiples para fiestas y reuniones, Wi-Fi en zonas comunes, gimnasio, sauna, micro cine, laundry con lavadoras y secadoras automáticas y un vestuario para personal de servicio, incluyendo asimismo un monitoreo privado a través del servicio de CCTV.
 
En lo que respecta a los créditos hipotecarios, Martino analiza que los créditos hipotecarios van a influir en el mercado. En primera instancia, esas líneas van a ir directo el stock actual de unidades en situación de escribanía (que se puedan escriturar inmediato). En el mediano plazo van a motivar un cambio en el modo de encarar los desarrollos inmobiliarios. “Si bien los primeros indicios de los créditos hipotecarios pueden verse dentro de 2016, el volumen será considerable recién en 2017”, sostiene.
 
Desde la empresa afirman que, al reactivarse el mercado por los créditos y con la estabilidad del dólar hasta fin de año, los desarrollos en obra y a estrenar se convierten en una gran oportunidad tanto para inversores como para compradores finales.