La empresa es líder en el tratamiento de cemento arquitectónico y se distingue porque sus productos no necesitan de gran preparación con respecto a los materiales empleados en la construcción y decoración de pisos, paredes y otros tipos de superficies. Este es el diferencial del servicio ya que permite ofrecer un costo accesible, que incluye una sencilla forma de aplicación, debido a que la masa se expande con facilidad sobre el espacio elegido.
Un ejemplo de la facilidad de aplicación es una obra que se realizó en Salta en un plazo de sólo nueves días para 750 m2. de superfice, que incluyó: cuatro tipos de moldes, dos de ellos para accesos vehiculares del tipo de espina de pescado. Para el ingreso a la vivienda y el borde de la pileta, el modelo seleccionado fue de tipo laja sin junta.
Por sus características, se ahorra tiempo y dinero, pero además permiten remodelar los pisos sin obra y en los plazos estipulados. Al respecto, Guillermo Camarero, director de Bomanite, explicó: “Cada vez más usuarios particulares adquieren nuestros productos para sus hogares, tanto para obras nuevas cómo para remodelaciones. En primer lugar porque no necesitan estar en obra para cambiar el piso, pero además pueden diseñar cualquier tipo dibujo y en unos pocos días la obra está terminada”.